Lectura. Daniel Cassany. Perspectiva Sociocultural. Leer críticamente.


Compartimos las conferencias de Daniel Cassany sobre Lectura:
"Prácticas letradas contemporáneas: la perspectiva sociocultural: enfoque, conceptos e investigaciones" 

y

Prácticas letradas contemporáneas por Daniel Cassany: leer críticamente. Ambas realizadas en el marco del congreso de Leer.es celebrado del 13 al 15 de Noviembre de 2009-

Por si les interesó lo que Cassany  recomienda en el minuto 9 de esta última conferencia, aquí están los enlaces para acceder a esos dos artículos:


10 claves para aprender a interpretar. Daniel Cassany

10 claves para enseñar a interpretar. Daniel Cassany

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LA ESCRITURA COMO PROCESO SEGÚN DANIEL CASSANY

Ficha de cátedra
por  MICHEL VAZQUEZ

La escritura y sus funciones:
La escritura es una manifestación de la actividad lingüística con un objetivo determinado, es una forma de usar el lenguaje en pos de estos objetivos y en algunas situaciones las intenciones pueden modificar el significado convencional de las expresiones. Saber usar la lengua no es solo saber usar las palabras en cada contexto comunicativo, sino es necesario saber interpretar correctamente la intención con que se utilizan, para esto es preciso relacionar las expresiones utilizadas con su contexto extralingüístico (emisor, destinatario, tiempo, situación).

El mensaje no estará en el texto, sino que se elabora a partir de la integración entre los conocimientos previos de los interlocutores y los signos escritos. El significado no es un mensaje completo e inmutable, se construye durante los actos de composición y lectura y nunca será el mismo para todos los lectores porque sus interpretaciones varían dependiendo de sus conocimientos previos.
Escribir no requiere solo de la habilidad de redactar, sino también de la lectura y la comprensión lectora: releemos los borradores que vamos elaborando para verificar que expresen lo que deseamos y dialogamos con coautores/lectores intermedios sobre el texto para revisarlo. El texto final dependerá, en parte, de estas destrezas de comprensión lectora, oralización y conversación que posea el autor.
Los rasgos distintivos de la escritura están estrechamente relacionados con sus funciones en la vida cotidiana. Adoptando una perspectiva lingüística, podríamos distinguir entre: funciones intrapersonales e interpersonales. Las primeras se refieren a cuando el autor y destinatario son la misma persona, es decir, la escritura constituye una herramienta de trabajo para desarrollar actividades personales, académicas o profesionales. Las segundas, aparecen cuando el autor escribe para otros y la escritura se convierte en un instrumento de actuación social para informar, influir, ordenar, etc.

Procesos cognitivos:
Hayes ofrece un modelo que integra aspectos socio culturales, cognitivos y emocionales. Incorpora la memoria de trabajo en su modelo y tiene en cuenta los elementos motivacionales y las formas videoespaciales de escrituras, destacando la influencia que ejercen las tecnologías sobre los procesos de composición.
La memoria de trabajo actúa como el lugar donde el autor vierte los datos recuperados de su memoria a largo plazo y los procesa con la aplicación de distintas tareas que pueden ser cognitivas (razonamiento lógico) o de control (recuperar datos de la memoria a largo plazo).
La memoria largo plazo aparece descrita por Hayes como el lugar donde el individuo guardó los datos lingüísticos y extralingüísticos que se utilizan para la composición del escrito. Hayes destaca la importancia de la experiencia previa de autor y especifica algunos conocimientos implicados en la composición (géneros, discursos, tipos de audiencia).
Flower y Hayes se interesan por los procesos cognitivos que intervienen en la composición de un texto y elaboran un modelo teórico que explica las estrategias utilizadas para redactar (planificar, releer, revisar, etc.) y las operaciones intelectuales que conducen a la composición (memoria a corto y largo plazo, formulación de objetivos, procesos de creatividad).
El modelo de Flower y Hayes concibe la composición de la escritura como una actividad dirigida a la consecución de objetivos retóricos, en ella podemos distinguir tres procesos: planificación, traducción y revisión. El modelo se presenta de manera recursiva y no lineal, concibiendo a la escritura como proceso y no como encodificación.
En la escritura como proceso podemos encontrar tres momentos:
  1. La planificación, que se refiere a la manera de trabajar del autor, del texto y a la estructura del texto a realizar. Tradicionalmente, los procesos que forman parte de la planificación son:
  • Formulación de ideas: consiste en definir los propósitos del texto y formular objetivos/formarse imágenes de lo que se pretende conseguir con el escrito.
  • Generar ideas: consiste en recuperar o actualizar datos de la memoria a largo plazo, que podrán ser relevantes para determinada forma de comunicación: ideas para incorporar el contenido del texto, técnicas de trabajo posibles, esquemas discursivos para copiar (tomar como modelo), rasgos sobre el lector para tomar decisiones retóricas.
  • Organizar ideas: se organizan los datos recuperados de la memoria a largo plazo en una estructura organizada acode a los objetivos.

  1. La textualización consiste en la elaboración de productos lingüísticos a partir de representaciones internas: el autor utiliza elementos del plan escrito en la planificación y los vierte en la memoria de trabajo para expresar el contenido de forma verbal y, luego, evalúa dicha forma (si el resultado es negativo reelabora).

  1. La revisión es el proceso considerado más importante según varios autores, Bereiter y Scardamilia trabajan con dos representaciones mentales: la del texto intentado y la del texto actual. El primero, se refiere al texto que el autor ha planificado y pretende conseguir, mientras que el segundo contiene solo las partes físicamente elaboradas del texto intentado.
Podemos distinguir tres etapas en la revisión del proceso de escritura:
  • Comparar: el autor compara el texto intentado con el actual en busca de desajustes.
  • Diagnosticar: se buscan los desajustes en el texto actual con la ayuda de conocimientos retóricos, estos están relacionados con los objetivos que tiene el autor con su escrito.
  • Operar: consta en elegir el método más adecuado para modificar el texto actual según los desajustes diagnosticados y en generar el cambio diseñado.

La escritura se concibe a menudo como un producto físico, finito y estático, dicha concepción solo responde a un parte de la actividad escrita: el producto final. Se piensa a la escritura desde este producto final porque los redactores solo difunden estas versiones y los lectores solo se interesan por ellas, la consideración de material intermedio (borradores, listas, esquemas) es negativa al considerarlos feos, sucios, torpes. La única imagen aceptada es la del texto pulcro con márgenes en forma de caja.
Daniel Cassany plantea pensar a la escritura como una acción que se desarrolla a través del tiempo y ocurre en la mente del autor, donde se desarrollan los procesos compositivos.

Bibliografía:

  • Cassany, D. Describir el escribir. Como se aprende a escribir, “¿Qué es el código escrito?” Y “Teorías sobre el proceso de composición”, Paidós, 4ª edición.

  • Cassany, D. Construir la escritura. Cap. 1 ¿Qué es escribir? Cap. 3 ¿Cómo enseñar?, Paidós Barcelona, 1999.
  • Cassany, D. Enfoques didácticos para la enseñanza de la expresión escrita, web de Daniel Cassany.

Reseña descriptiva de "Para ser letrados. Voces y miradas sobre la lectura” de la obra de Daniel Cassany, (comp.)

Reseña descriptiva de la obra de Daniel Cassany, (comp.), Para ser letrados. Voces y miradas sobre la lectura”. Ed. Paidós, Barcelona, 2009.-
Por Gisela Pérez 

La editorial Paidós publicó en 2009 el libro “Para ser letrados. Voces y miradas sobre la lectura”; obra que compila, bajo la dirección de Daniel Cassany, una serie de artículos pertenecientes a varios autores (Ernesto Martín Peris y Cristina Aliagas Marín, entre otros). El libro presenta una mirada social de las prácticas lectoras, basada en los recientes estudios socioculturales.
La obra propone, básicamente, un itinerario de lectura que recoge las vivencias personales de sus autores, recupera sus experiencias de aprendizaje y los procesos de su formación lectora, sus prácticas de enseñanza; vivencias que abarcan desde los niveles iniciales de escolaridad (prácticas tempranas de lectura y comprensión de textos) hasta los estudios superiores del nivel universitario.

Aprendemos a leer cuando accedemos a un escrito particular, en un contexto real, cuando nos damos cuenta de cómo lo usan los que ya lo conocen y cuando nos atrevemos a poner nuestra voz y nuestra historia en el mismo.
Además de las habilidades de descodificación y comprensión de los textos, el sujeto debe aprender a usar el texto leído. La lectura de un texto es significativa y funcional al sujeto cuando este puede dale el valor exacto que ese escrito tiene para su vida en ese momento especifico (¿para qué leemos?, ¿cómo utilizamos esa lectura?, ¿qué hacemos después de leer?).
El libro invita a la reflexión acerca de las prácticas de enseñanza y aprendizaje de la lectura en los diferentes contextos sociales y culturales, entre ellos, los escolares (el capítulo 5 “¿Enseño a leer a mis alumnos de manera crítica?” traza un test auto-evaluativo en el que docentes repasan su práctica); invita a repensar los modos de lectura, el proceso de formación lectora, las estrategias empleadas para su enseñanza y aprendizaje, etc.

Con propuestas didácticas versátiles, recupera formas de enseñanza-aprendizaje con sentido crítico y reflexivo. Busca colaborar en el trabajo de los profesionales de la educación de cualquier disciplina o campo de saber y en todos sus niveles de formación. El lector se encuentra con una guía práctica para su labor diaria.

La escritura como proceso dinámico y espiralado: aportes de Daniel Cassany.

FICHA DE CÁTEDRA:


Por Daiana Illa

La presente ficha de cátedra está pensada para los alumnos de la formación docente del profesorado para el nivel secundario, estudiantes en formación para otros niveles y docentes, a quienes pueda aportar una mirada global sobre la escritura.
Para la confección del presente texto se retomaron los aportes teóricos de Daniel Cassany, quien propone un panorama global sobre el proceso complejo de escritura. Este autor piensa a la escritura como un sistema autónomo, con sus particularidades y de vital importancia para la comunicación humana.

Según Cassany, la escritura es la manifestación de la actividad lingüística que nos es propia a los seres humanos. Es una actividad humana que hace uso del lenguaje para que signifique lo que pretendemos significar, con el fin de concretar un objetivo. Sin embargo, además de lenguaje e intencionalidad necesita asociarse a un contexto comunicativo para que esa escritura pueda ser interpretada.
Cassany, D. (1999) construir la escritura. Cap. 1 ¿Qué es escribir?
Entonces, la escritura es un acto contextualizado porque es utilizada en una determinada comunidad de hablantes que comparte una base cultural común. Es decir, una concepción del mundo y determinados conocimientos enciclopédicos. Lo que se escribe en el acto de composición constituye una parte de lo que se quiere comunicar, por lo que se necesita del contexto para una correcta recepción e interpretación del mensaje.
Ese mensaje es elaborado, entonces, partiendo de la interacción entre los conocimientos previos de los interlocutores (conocimiento enciclopédico, léxico, etc.) y los signos escritos. Por lo que este teórico concibe a la escritura como un proceso que es dinámico, y a la vez, abierto de construcción de significado. Es decir, no podemos pensar a la escritura como un proceso espontáneo, lineal y acabado, sino que todo lo contrario: es un proceso planificado, espiralado, dinámico y abierto a la revisión.
La escritura como sistema autónomo
Como se enunció al principio, Cassany piensa a la escritura como un sistema de signos equiparable (en importancia) al código oral, con una autonomía que le da entidad propia e independencia con respecto a la oralidad.
La escritura, en tanto sistema, posee reglas y características que les son propias y difieren del código oral. De entre las reglas que este autor propone tener presentes, hace énfasis en las siguientes:
  • Adecuación: propiedad del texto que determina la variedad y registro que se debe emplear para presentarse como un escritor competente.
  • Coherencia: entendida como de naturaleza semántica, que trata sobre el significado del texto, es la propiedad que va a seleccionar la información y organizar la estructura comunicativa de un modo determinado.
  • Cohesión: pensada como la propiedad de carácter sintáctico, es la que conecta las diferentes frases entre sí mediante mecanismos de cohesión para asegurar: la comprensión de cada frase en relación con el resto, y la comprensión del significado global del texto.

Modelos teóricos sobre la composición escrita
Teorías sobre el proceso de composición”
Para explicar la compleja actividad intelectual que significa la escritura, Cassany retoma algunas teorías que ofrecen una visión completa sobre este proceso.
  • El modelo de las etapas: propuesto por Gordon Rohman quien concibió a la escritura como un proceso complejo formado por tres fases. En primer lugar, pre-escribir que es la etapa intelectual e interna en la que el autor va a elaborar su pensamiento y todavía no escribe frase alguna. En segundo y tercer lugar, escribir y re-escribir que comprenden las etapas de la redacción del escrito propiamente dicha: desde las primeras ideas hasta la corrección final.
  • El modelo del procesador de textos: trabajado por Teun A. Van Dijk ofrece un modelo general de procesamiento de textos que incluye tanto la comprensión como la producción de los mismos. Retoma conceptos de la lingüística textual y un enfoque cognitivo para elaborar un conjunto de reglas (operaciones mentales) para la codificación y la descodificación de textos.
Uno de sus conceptos básicos es la macroestructura: un resumen mental, un conjunto de informaciones de importancia que presenta un orden lógico, elaborado en la mente de un sujeto para procesar un texto.
  • El modelo de las actividades académicas: retomando la propuesta del modelo de las etapas, May Shih propone redefinir sus etapas en: pre-escribir, escribir el borrador y revisar. Debido a que concibe que los textos académicos quedan por fuera de la propuesta de Rhoman, ya que presentan una estructura variable, con limitaciones en cuanto al tiempo de elaboración disponible en las instancias académicas, el lenguaje especializado y la objetividad que demanda.
  • Los modelos cognitivos: con un interés enfocado en los procesos cognitivos que intervienen en la composición escrita, Flower y Hayes elaboran un modelo que da cuenta de las estrategias que se emplean para redactar y de las operaciones intelectuales que conducen la composición. Es decir, que en su propuesta contemplan por un lado, los procesos de planificación, re-lectura, revisión y la jerarquización a la hora de autocorregirse o corregir; por otro, la intervención de las memorias (operativa y de largo plazo), la formación de objetivos, etc.
Los modelos cognitivos: una actualización-.

El modelo que ha tenido una amplia difusión es el de Hayes y Flower, el cual presenta a la escritura como un proceso recursivo, donde los procesos que implica plantean un orden y una interacción variada e indeterminada. Cassany presenta una actualización por parte de Hayes (1996) de ese modelo cognitivo.


Dicho modelo incorpora un componente actitudinal y motivacionales, incorporación que integra aspectos socioculturales, cognitivos y emocionales; lo individual y colectivo.
En esa distinción del componente individual del contexto sociocultural. En lo que respecta a lo individual se destaca una interrelación triangular entre los componentes afectivos (Motivación/ Emociones), cognitivos (Procesos comunicativos) y conceptuales (Memoria a largo plazo).
Por un lado, en el componente motivador y emocional se presenta la influencia que tienen los valores o las creaciones sobre la escritura en acto de escribir. Por otro, el componente de conceptual que tiene lugar a nivel de la memoria. Hayes distingue dos tipos de memorias:
  1. Memoria de trabajo: aquella que constituye un recurso limitado para el autor, donde se puede llegar a producir la “sobrecarga cognitiva”; aquel fenómeno que a causa de altas y variadas exigencias en la composición de la composición desbordan la limitada capacidad de dicha memoria, por lo que da lugar a la producción de “desajustes” en el texto compuesto.
  2. Memoria a largo plazo: es el almacén ilimitado donde el sujeto guarda los datos lingüísticos y extralingüísticos que utiliza para la composición. En ella se alojan ‘esquemas’ de tareas que se corresponden a ‘paquetes de información’ de carácter procedimental para ejecutar las diversas actividades que comprende la composición.
En cuanto al componente cognitivo, Cassany coloca allí el foco de atención. Este autor plantea que las conductas cognitivas que tienen su realización en la escritura de autores variados, en estos últimos años han tenido mayor influencia las investigaciones desde la psicolingüística. Esta disciplina ha formulado modelos teóricos para lograr explicarlas (a esas las conductas) partiendo de la identificación de las principales tareas que tiene que resolver el autor mientras escribe.
El modelo actualizado por Hayes (1996) reorganiza los procesos cognitivos en: interpretación textual, reflexión y textualización.
  • Interpretación textual: se ocupa de elaborar representaciones internas de imputs (verbales o no) a través de la lectura. Dicha tarea es un proceso central de la composición, y presenta tres tipos:
  1. Leer para comprender textos: es la lectura y la interpretación de textos que el autor va a poder utilizar con fuente informativa, modelo u orientación para la escritura.
  2. Leer para comprender la tarea: es la interpretación de las instrucciones escritas que, de acuerdo con el contexto, definen las tareas de composición. Lograr elaborar representaciones precisas sobre el ‘problema retórico’.
  3. Leer para evaluar el texto: es la interpretación del texto que va gestando el autor. Es aquella que se realiza para revisar, para construir el significado del texto y así poder realizar la comparación entre lo que se quería producir y lo que se obtuvo. Esta tarea es necesaria a fin de {detectar los ‘desajustes’ para luego identificarlos y operar sobre ellos.

  • Reflexión: se trata de construir representaciones nuevas a partir de las existentes. Son tres tipos:

  1. Solución de problemas: se trata de elaborar un método mental para conseguir un objetivo cuando no disponen en la memoria a largo plazo.
  2. Toma de decisiones: consiste en evaluar las opciones posibles para un hecho y elegir una.
  3. Inferencia: se trata de elaborar información nueva partiendo de la vieja, es decir: expandir los datos ya conocidos a fin de superar la encapsulación de posiciones o puntos de vistas.
En la reflexión propone incluir a la planificación para elaborar una configuración del texto, que puede ser representación mental alojada en la memoria de trabajo o tener forma gráfica.
La planificación está incluida en los procesos de reflexión como un tipo de solución de problemas. Se incluyen en ella operaciones para elaboración de una configuración del texto bajo una representación mental situada en la memoria de trabajo.
En la planificación intervienen una serie de procesos:
  1. Formular objetivos: es la definición de los propósitos del texto; formación de imágenes de lo que se pretende conseguir.
  2. Generar ideas: consiste en actualizar o recuperara de la MLP todos los datos relevantes.
  3. Organizar ideas: darle un orden a los datos recuperados, que fueron generados de una manera caótica, en una estructura organizada según principios y criterios acordes con los objetivo.

  • Textualización: se trata de la elaboración de productos lingüísticos (grafías) a partir de representaciones internas.

Hayes propone el proceso “provisional” de generación de prosa:

  • En primer lugar, el autor utiliza elementos del plan del escrito y de la prosa elaborada hasta entonces para recuperar paquetes de contenido semántico, almacenados en la MLP.
  • Seguido a ello, vierte dichos paquetes en la memoria de trabajo.
  • Luego, elabora una posible forma verbal oara expresar dicho contenido y la almacena en una memoria articuladora temporal. Repite la operación hasta agotar el contenido semántico guardado en la memoria de trabajo.
  • Después, articula la forma verbal elaborada de manera vocal o subvocal.
  • Finalmente, evalúa dicha forma y, si obtiene resultado positivo, la redacta; si es negativo, repite los dos anteriores pasos.
Cassany, trata un proceso que es de importancia en la composición escrita: la revisión.
La revisión la propone desde el modelo Comparar- Diagnosticar-Operar de Beretier y Scardamalia (1987). Este modelo concibe su presencia durante toda la composición, actuando en cualquier producción, ya sea intermedia o final, e interrumpiendo otros procesos.
Dicho modelo trabaja con dos representaciones mentales:
  • El texto intentado: es aquel que el autor ha planificado, la meta que quiere conseguir. Es una representación global de la unidad discursiva, que incluye aquellas partes que el autor todavía no ha elaborado.
  • El texto actual: son los planes o borradores realizados por el autor. Puede contener las partes físicamente elaboradas del mismo.

Las etapas que presenta son: una primer etapa, denominada comparar, donde se contrasta las dos representaciones en busca de desajustes: si detecta un desajuste, se pasa a la siguiente etapa. La segunda etapa, denominada diagnosticar, es la búsqueda en el texto actual de la causa del desajuste. Si el autor acierta en identificar la causa tiene dos posibilidades: 1- cambiar el plan, y la representación del texto intentado, 2- modificar el texto actual. En el caso de no lograr identificar la causa, puede regresar a comparar o dejar el modelo. La tercer etapa es operar, que consta de dos pasos: 1- elegir la táctica: escoger el método más adecuado para modificar el texto actual atendiendo la causa del desajuste; 2- generar el cambio: realizar el cambio diseñado.
Bibliografía:

  • Cassany, D. (s/f) Describir el escribir. Cómo se aprende a escribir, “¿Qué es el código escrito” y “Teorías sobre el proceso de composición”. Paidós, 4° edición.
  • Cassany, D. (1999) construir la escritura. Cap. 1 ¿Qué es escribir? Paidós: Barcelona. 

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